martes, 18 de marzo de 2014

Amalia Arce nos cuenta...

Amalia Arce es pediatra y madre de 2 niñas. En las redes sociales la conocen como la mamá pediatra. En su blog escribe acerca de experiencias profesionales y reflexiones a las que la maternidad le lleva.
Uno de sus posts, que tan amablemente nos ha cedido para publicar en este blog, trata sobre las emociones en los niños, cómo canalizarlas, cómo ayudarles a expresarlas.

Se titula Son pequeños, pero no son tontos, y aquí os copiamos el principio, invitándoos a seguir leyendo su artículo siguiendo el enlace.

Martina tiene dos años. Hasta el momento ha sido una niña sana, que comía y dormía bien. Todo era fácil. Le costó un poquito adaptarse a la guardería el año pasado, pero ahora va contenta y alegre. La familia vive un momento igualmente feliz. La mamá está esperando otro bebé, esta vez un niño, que nacerá a finales de abril. Lleva unos días de baja porque se sentía muy pesada para ejercer su trabajo, donde estaba muchas horas de pie y con presión laboral.
En los últimos días, tanto las educadoras como la familia notan a Martina algo más triste. Y ha dejado de comer.

Olivia tiene seis años. Siempre ha sido una niña movida, pero como tantos otros niños de su edad. Es delgada y activa, y tiene una sonrisa pícara, como de estar siempre tramando alguna cosa.
Sus padres han decidido separarse. Su padre tiene ya otra relación con otra mujer y no lo oculta. Sin embargo siguen conviviendo mientras arreglan papeles y circunstancias.
La niña cada vez está más descontrolada. No para quieta ni un momento. Y ha empezado a tener reacciones de llanto e irritabilidad ante cualquier contratiempo.

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1 comentarios:

  1. Que alegría ver este artículo, es muy interesante porque en ocasiones con nuestras preocupaciones de adultos no observamos lo que reflejamos en los peques. Gracias Amalia y gracias Marta.

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